Operadoras móviles dicen no haber notado el "día sin móvil"

Las operadoras móviles españolas dijeron el jueves por la tarde que la convocatoria para que hoy no se utilizara el teléfono móvil en protesta por la subida de precios tuvo poca incidencia en el tráfico de mensajes y llamadas, según fueron citadas por medios.

La campaña "Un día sin móvil" surgió en la web www.boicot.es.kz "contra el abuso de las operadoras móviles", después de que Movistar, Vodafone y Orange anunciaran sucesivamente el mismo aumento de precios para compensar el efecto de la nueva ley que prohibirá el redondeo en las llamadas.

"Vodafone no ha pactado con nadie y de hecho nuestra decisión es distinta de las decisiones que han tomado el resto de los operadores", aseguró el jueves el director de relaciones institucionales de Vodafone a CNN+.

El pasado 6 de febrero ya se celebró otra jornada de protesta que pedía que no se usara el móvil y que apenas tuvo efectos, según también citaron medios a fuentes de las operadoras.

"Estoy utilizándolo, pero por problemas de trabajo, qué se le va a hacer", dijo un usuario en declaraciones a TVE.

"Antes nos quejábamos del monopolio de Telefónica, pero ahora resulta que las otras, las liberales, cogen y se suman, pues es otro tipo de monopolio", dijo una mujer a Telvisión Española.

Ya a mediodía, representantes de Orange informaban a Reuters de ninguna anomalía en el tráfico de mensajes y llamadas.

No fue posible contactar con ningún portavoz de las tres compañías para confirmar los datos del final del día.

A la campaña, además de numerosos grupos de defensa de los derechos de los consumidores, como la UCE, la OCU, FACUA o ADICAE, se unió el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, que dijo que "intentaría utilizar el teléfono lo mínimo pero dado el cargo que ocupo, ustedes entenderán que si tengo que utilizarlo lo utilizaré".

La Ley de Mejora de la Protección de los Consumidores y Usuarios fue aprobada por el Pleno del Congreso de los Diputados el 21 de diciembre y prohíbe que se cobre por un tiempo que no se consume, acabando con la práctica llamada del "redondeo", por el cual las compañías facturaban un minuto entero aunque sólo se hubiese hablado unos segundos.

A partir de entonces, las tres grandes operadoras informaron de que el precio de establecimiento de la llamada subiría de 12 a 15 céntimos de euro y un incremento en la tarifa nominal por minuto, aunque cobrando por segundos y no por tramos.